miércoles, 10 de diciembre de 2014

Reseña: Colmillo Blanco - Jack London

Título: Colmillo blanco
(White fang)

Autor: Jack London

Género: Aventuras

Editorial: Espasa

Encuadernación: Tapa blanda

Páginas: 220

Primera publicación: 1906 (esta 1998)




“Era su instinto, pues representaba la selva, lo desconocido, lo terrible, la eterna amenaza, lo que acechaba en la oscuridad alrededor de los fuegos del mundo primitivo, cuando ellos, echados muy cerca de las llamas, educaban sus instintos, aprendiendo a temer la selva de la que provenían, a la que habían desertado y traicionado.”


Colmillo Blanco es un lobo, durante las páginas de este libro acompañaremos a Colmillo Blanco desde su concepción, hasta que es adulto, pasando por los distintos períodos de aprendizaje, pasando por las épocas bonitas y felices y pasando por las épocas duras y atroces. Todo en estado salvaje, todo desde el punto de vista de un lobo.



Cuando compré este libro hace ya un par de años, conseguí una serie de clásicos que pensé que me podrían gustar. Colmillo blanco lo elegí porque a mí me gusta todo lo relacionado con la naturaleza y me encantan los bosques y los animales. Y la mayoría de protagonistas de este libro son lobos u otros animales, y los escenarios son los bosques helados de Alaska. Y no andaba yo desencaminada, porque la verdad es que me ha encantado.

Este libro es simple y complejo a la vez: puede parecer simple, porque se trata de la vida y el aprendizaje de un lobo, y no hay nada más simple que la ley de la selva ¿no? “Devora o te devorarán”. Pero pienso que a la vez es complejo, porque aunque tú seas humano, te sientes identificado muchas veces con lo que le ocurre a Colmillo Blanco, por tanto, pienso que es como una analogía, entre la vida animal y la vida humana. Por ejemplo, cuando Colmillo Blanco encuentra gente amable y leal, Colmillo Blanco es amable y leal con ellos, cuando Colmillo Blanco encuentra gente cruel y que es violenta con él, Colmillo Blanco es cruel y violento. Cómo digo una y mil veces, los humanos muchas veces somos como el mundo nos ha hecho, eso es lo que le pasa a Colmillo Blanco. Simple y complejo a la vez.

Para mí era todo tan bonito y tan interesante, las páginas pasaban tan rápido, había tantas aventuras, me dio mucha pena terminarlo. Hay libros que pueden resultar parecidos, como El libro de la selva, de Rudyard Kipling, pero no es igual, ya que El libro de la selva es más infantil. En cambio Colmillo Blanco me parece un libro adulto, mucho más serio, no me parece una fábula, sino un libro contado desde el punto de vista de un lobo, de manera más inteligente.

Os recomiendo mucho que lo leáis, sobre todo si os gusta la naturaleza. Es una de las últimas lecturas que he hecho este 2014  y es una de las mejores de este año. Me siento muy contenta de haberle dado una oportunidad, y sé que lo volveré a leer más veces.




2 comentarios:

Isabel dijo...

Lo tengo en casa pero aun no lo he leído, el que sí he leído y releído es La llamada de lo salvaje del mismo autor y es realmente genial uno de los mejores libros que he leído. Besos.

Shorby dijo...

Qué clasicazo traes hoy =)

Besotes